Una veintena de incendios forestales asolan la mitad norte peninsular
Unaveintena de incendios forestales asolan la mitad norte peninsular
9 August 2005
publishedby Diariode Tarragona
Las llamas calcinaron este fin de semana más de 3.000 hectáreas en la veintena de siniestros declarados en Castilla y León, Galicia y Madrid. Según todos los indicios, el incendio de la localidad abulense de Casa Vieja, donde falleció un joven que trataba de apagarlo, fue provocado. Más de 700 hectáreas han quedado destruidas, mientras los servicios de Protección Civil procedieron a la evacuación de más de mil personas como acción preventiva: 700 de un camping, 300 de un campamento juvenil y un centenar de niños en una granja escuela.
Aunque el fuego continuaba ayer noche fuera de control y avanzaban hacia la localidad de Piedralaves, las autoridades decidieron reducir el nivel de riesgo a uno ante la lejanía de las llamas a las poblaciones y carreteras importantes. La Comunidad de Madrid envío dos dotaciones de bomberos y un retén que se sumaron a los medio facilitados el sábado. En total una docena de aviones y helicópteros apoyaron las labores de las cuadrillas y maquinaria terrestre.
A diferencia de las polémicas suscitadas por motivos de incendios en otras regiones por ejemplo, el ocurrido el pasado mes de julio en Guadalajara con el resultado de 11 víctimas, en Castilla y León tanto los responsables de la Junta como los del Gobierno Central alabaron la perfecta cooperación y colaboración que se había producido en los fuegos registrados desde el pasado miércoles en las provincias de Ávila y León.
En Galicia, las brigadas trabajaron para tratar de apagar los 17 fuegos declarados en la comunidad autónoma. Los mayores afectaron a los términos municipales de en Gomariz (Orense) y en Serantes (La Coruña). Asimismo, las llamas también afectaron a localidades de Lugo y Pontevedra. En esta última, dos incendios tuvieron como escenario al término municipal de Redondela, próximo a Vigo.
El único siniestro que a media tarde del domingo parecía controlado era el que afectaba a la localidad madrileña de Galapagar. Cinco dotaciones de los Bomberos de la Comunidad vigilaban las llamas que calcinaron parte de un encinar en la carretera que une esta localidad con Torrelodones, en las inmediaciones de la A-6. Pese a los numerosos chalés de la zona no hubo que evacuar a ningún vecino
