Humo a la vista

Humo a la vista

11 December 2005

published by www.diarioladiscusion.cl


CHILE — Durante los meses de verano se podría registrar en Chile, la desaparición de unas 50 mil hectáreas de plantaciones forestales, como consecuencia de incendios forestales.

Esta es una estimación basada en promedios de superficie quemada en los últimos años, pero podría ser más o tal vez menos, si es que se observan las estadísticas.

Así, el año pasado sucumbieron a las llamas más de 60 mil hectáreas en todo el país, mientras que en la temporada 2001-2002, las pérdidas ascendieron a 90 mil. En 1998-99 se contabilizaron 101 mil hectáreas quemadas y en contraste sólo 10 mil durante el verano de 2001-2001.

TEMPORADA DIFICIL Esta temporada se prevé como difícil en la provincia, dijo el jefe regional de planificación y desarrollo de Conaf, Luis Valenzuela debido al aumento de la biomasa en los campos.

Piensa que si se produce un verano seco, los incendios forestales, tenderían a concentrarse en los meses de febrero y marzo.

REGISTROS EN ÑUBLE Según informó Valenzuela, el año pasado(verano 2004-2005), hubo 364 incendios en la provincia, que destruyeron 743 hectáreas.

En cuanto a tipo de combustibles, las plantaciones forestales fueron dañadas en 379 hectáreas; el bosque nativo, en 8,69; matorrales, 163; pastizales 152 y desechos forestales y otros, con 28 hectáreas.

BOSQUES PARA CHILE Un análisis, efectuado por Guillermo Julio, director de Bosques para Chile, se da cuenta que en el país se registra un promedio anual de 5 mil 352 incendios forestales, con daños a casi 50 mil hectáreas de diversos tipos de vegetación. Dijo que “si se mantiene la tendencia observada en los últimos años, se espera que también en la presente temporada desaparezcan un total de 50 mil hectáreas de plantaciones forestales, arbolados nativos y vegetación, con el consiguiente daño económico y medioambiental para la actividad forestal chilena, que anualmente exporta alrededor de US$ 3400 millones”.

NEGLIGENCIA El profesional, afirmó que “en la práctica, todos los incendios forestales en Chile se originan por acciones humanas negligentes o premeditadas y este aspecto de la protección no ha sido encarado con la suficientefuerza”.

El estudio, sostiene que las regiones más afectadas por los incendios forestales son la Octava, Novena, Quinta y Metropolitana, precisando que, en general, la cantidad de incendios tiene una estrecha relación con la densidad poblacional y la intensidad de actividades humanas en zona rurales, como tránsito, turismo y operaciones silvoagropecuarias.

PREMEDITACION Destaca que si bien antes del año 1950 las quemas provocaron alrededor del 70% de los incendios forestales, en la actualidad éstas explican sólo el 10% de los siniestros.

Sin embargo, señala que es preocupante la premeditación o intencionalidad en los incendios, que de acuerdo a un estudio del Laboratorio de Incendios Forestales de la Universidad de Chile, cuya incidencia está superando el 40% de la ocurrencia, en tanto que el llamado “tránsito de peatones” llega al 27,5% de los siniestros que ocurren anualmente en el país.

EFECTOS Indicó que los incendios forestales provocan enormes daños e impactos, los que pueden calificarse en directos, que son las pérdidas referidas a bienes cuantificables, transables en el mercado, como maderas, construcciones, ganado y otras.

Además, generan efectos indirectos, que corresponden esencialmente a impactos sociales y ambientales, con perjuicio a valores intangibles y que tienen que ver con los efectos del fuego en la flora, fauna, suelos, aguas y atmósfera que afectan al medio ambiente y –también- al sustento económico que proveen los recursos naturales renovables a lasociedad.

El académico expresa que las pérdidas indirectas pueden llegar a ser hasta diez veces más elevadas que las pérdidas directas provocadas por una determinada situación.

Expresa que “no obstante los esfuerzos que están efectuando tanto la Corporación Nacional Forestal como las empresas forestales, que han adquirido una gran experiencia y efectividad en la aplicación de planes de combate contra el fuego, el problema se mantiene”.

Añadió que “en alguna medida, los resultados de la mayor eficacia que se ha venido adquiriendo en los programas de protección forestal están siendo contrarrestados por condiciones ambientales que han tornado más severas en los últimos años, especialmente como consecuencia del cambio climático.

Por otra parte, el comportamiento de la población también ha evolucionado y está impactando gravemente el incremento de la intencionalidad como causa de incendios forestales”.


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