Fires in Costa Rica

Fires in Costa Rica

27 March 2004


Around 8000 ha have been affected by wildland fires since last week in the Talamanca Region in southern Costa Rica, close to the border of Panama. Areas affected include pastures, and paramo forests at an altitude of above 3000 masl. It is feared that the fires will pass over and affect the International Park La Amistad between Costa Rica and Panama, the closest fires only being around 1000 m away from the park.

Today already 121 volunteer fire fighters are working in the area. They have to travel distances of over 10 hours on foot to reach the area. Water and food supplies are provided through a small helicopter that has been facilitated by the Standard Fruit Company. It has also already been used to evacuate three exhausted volunteer fire fighters.

Fire fighting is carried out with hand tools, as it is impossible to carry water. The only choice would be by helicopter, but there is no helicopter available in the country. Help has therefore been requested from the governments of the United States, Panama and Nicaragua, but sofar no answer has been obtained. The government of the United States has anounced support of $ 20 000 in equipment such as water bottles, first aid kits, trousers, gloves, helmets, fire rakes and backpack pumps.

(This information has been taken from the daily newspaper of La Nacion, Costa Rica. See following articles for full story in Spanish.)

26 March 2004

8.000 hectáreas arrasadas en cerro Dúrika

Un incendio en el cerro Dúrika, en Buenos Aires de Puntarenas, que ya devastó 8.000 hectáreas, obliga al país a gestionar helicópteros foráneos para el traslado de brigadas y equipos que frenen las llamas.

La petición de ayuda se hace ante los gobiernos centroamericanos y de Estados Unidos.

El incendio –desatado desde el sábado anterior–, está arrasando con miles de especies de flora y fauna.

El viceministro de Ambiente y Energía, Allan Flores, confirmó ayer que las aeronaves facilitarán el ingreso de las brigadas de incendio. El avance a pie tarda unas 10 horas desde el último punto de acceso en vehículos doble tracción.

En las 8.000 hectáreas arrasadas cabría unas 125 veces el parque metropolitano La Sabana, en San José.

Según Flores, durante la tarde de este jueves él y varios representantes de la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE), visitaron la Embajada de los Estados Unidos para pedir asistencia. Para la noche no descartaban insistir en las peticiones con otros funcionarios de las naciones centroamericanas y lanzar una declaratoria de emergencia nacional.

Marcia Bosshart, de la legación estadounidense, confirmó la visita y aseguró que la Oficina de asistencia en desastres ya está valorando las alternativas de apoyo.

El fuego arrasa

Desde el sábado anterior el fuego está consumiendo miles de hectáreas de pastizales, potreros y bosque de altura o páramo.

En la zona son comunes los robledales, los helechos, las epífitas y el musgo.

También es terreno propicio para centenares de especies de anfibios y reptiles, aves como el quetzal y algunos mamíferos como dantas, pumas, monos cariblancos y leones breñeros.

Actualmente las llamas se desplazan por la parte media del cerro, a unos 3.200 metros sobre el nivel del mar.

El temor de las autoridades del Ministerio del Ambiente es que el incendio siga avanzando hacia el noreste, pues el cerro colinda con el parque internacional La Amistad, de casi 200.000 hectáreas.

Ayer a las 4:30 a. m. salió de Buenos Aires una brigada de 30 hombres que caminaron 9 horas para llegar al punto de trabajo.

Armados con palas, escobones y machetes, estos bomberos están cortando maleza y dejando enormes tramos de la montaña en tierra negra para que hagan las veces de cortafuegos.

Rónald Carballo, de la unidad de bomberos forestales del Instituto Nacional de Seguros, explicó que es imposible controlar estos incendios con agua porque el traslado del líquido es prácticamente imposible.

La única alternativa sería el uso de un helicóptero con un dispositivo que permite descargar agua sobre la zona. Sin embargo, no se tiene conocimiento de que existan unidades como estas en Centroamérica.

Carballo resaltó la labor de los apagafuegos que ya están en Dúrika. Todos han tenido que escalar tramos de montaña con inclinaciones de 70 u 80 grados.

Además, el fuego no es solo a ras de suelo, también se está presentando en las copas de los árboles, eso hace aún más peligrosa la faena, resaltó Alex Solís, jefe de operaciones de la CNE.

Apoyo institucional

Por ahora, esa labor también cuenta con la colaboración de la Fuerza Pública.

El director de este cuerpo, Wálter Navarro dijo anoche que hay 50 oficiales en la zona apoyando en labores de monitoreo del fuego. También serían los responsables de evacuar a los pobladores del cerro si el fuego se desplazara a localidades como la reserva indígena Ujarrás.

Para hoy se espera el ingreso de 60 voluntarios más que entrarán a tratar de controlar el fuego y no se descarta que para el fin de semana estén unos 100 apagafuegos en esa zona.

Temporada de incendio

De diciembre a junio de cada año el fuego amenaza:

Marzo de 1976: Un gigantesco incendio de proporciones no cuantificadas en notas de prensa arrasó con todo el páramo del cerro Chirripó.

1992: El Parque Nacional Santa Rosa, en Guanacaste perdió 11.836 hectáreas.

Febrero del 2001: 5.000 hectáreas de bosque primario y pastizales se perdieron en la reserva indígena Ujarrás, en Buenos Aires de Puntarenas.

Marzo del 2003: El Refugio Nacional de Vida Silvestre Caño Negro enfrentó el peor incendio de ese año. 1.660 hectáreas de bosque y humedales se perdieron por incendios provocados.

Marzo del 2004: 8.000 hectáreas ya se han quemado en el cerro Dúrika. Los tres focos de fuego están ubicados en el cerro Dúrika, Santa María Brunca y el cerro Olán.

Hasta ayer no se tenía identificada una causa del fuego. No descartan que haya sido provocado.

Source: La Nacion, Vanessa Loaiza N. (vloaiza@nacion.com), Colaboraron el periodista Álvaro Murillo y el corresponsal Freddy Parrales.

27 March 2004

121 personas luchan contra el fuego en Dúrika

Los bosques y potreros del cerro Dúrika, en Buenos Aires de Puntarenas, llevan siete días bajo fuego. Mientras tanto, la ayuda internacional solicitada es escasa.

Hasta ayer solo la embajada de los Estados Unidos anunció la entrega de $20.000 en equipos como cantimploras, botiquines, pantalones, guantes, cascos, rastrillos forestales y bombas manuales.

Eso sí, siguen pendientes de aparecer los helicópteros prestados que el país pidió desde este jueves al Gobierno estadounidense, así como a Nicaragua y Panamá.

Según la vocera de prensa de la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE), Rebeca Madrigal, solo Panamá confirmó ayer que no cuenta con unidades disponibles para trasladar bomberos forestales a las empinadas montañas donde se libra la lucha contra las llamas.

Mientras tanto, 121 personas, entre bomberos y voluntarios, ingresaron a pie para tratar de combatir el fuego que ya consumió 8.000 hectáreas de bosques de altura o páramos, pastizales, helechales y potreros.

Se estima que las brigadas caminan entre tres y 11 horas para llegar a los focos de incendio ubicados a alturas que oscilan entre 1.800 y 2.800 metros sobre el nivel del mar.

El comandante del incidente destacado en Buenos Aires, Luis Diego Román, explicó ayer que estos grupos están trabajando en roles de cuatro días. En la primera jornada ascienden, trabajan dos días como “cortafuegos” y el cuarto lo dedican a regresar a Buenos Aires.

Ayuda local

Estos grupos de apagaincendios se convirtieron en los últimos días en la mejor muestra de trabajo en equipo.

Hasta ayer estaban conformados por policías de la Fuerza Pública, bomberos del Instituto Nacional de Seguros, funcionarios del Ministerio del Ambiente y Energía (Minae), Acueductos y Alcantarillados y del Instituto Costarricense de Electricidad.

Tampoco faltan los cruzrojistas, miembros de la comisión local de emergencias y empleados de la empresa Pindeco.

El alimento y el agua para ellos llega desde ayer gracias a la colaboración de la compañía Standard Fruit Company, que facilitó un pequeño helicóptero.

En esa unidad vuelan tres funcionarios del Minae. Fueron evacuados tres voluntarios más que ya sufrían de agotamiento, dijo el comandante Román.

Para hoy se espera el ingreso a la montaña de 25 ó 30 personas más.

Tras siete días de fuego, los principales focos están localizados en Dúrika, los cerros Olán, Brunka, Elí, Ákata y la fila Santa María.

Los últimos reportes aéreos de la Fuerza Pública advierten que en algunos sitios, como Dúrika, el fuego está a 1.000 metros del límite con el Parque Internacional La Amistad, área protegida en conjunto con Panamá de casi 200.000 hectáreas.

Viento benévolo

Hasta este viernes la poca fuerza del viento facilitó de alguna manera el trabajo de quienes combaten las llamas.

La información fue confirmada gracias a las imágenes de satélite del Instituto Meteorológico Nacional, en que aparecen columnas de humo menos extensas que las reportadas en días anteriores.

Con el viento a favor, los voluntarios están dedicados a cortar la maleza y dejar tramos del bosque en tierra vegetal.

También es combatido con escobones y en las partes más llanas con bombas de agua portátiles.

Lentísima recuperación

Reverdecer del cerro Dúrika puede tardar décadas

El cerro Dúrika alcanza una elevación de 3.280 metros sobre el nivel del mar.

Desde el 22 de febrero de 1982 se convirtió en el límite natural del Parque Internacional La Amistad Costa Rica- Panamá.

A esa altura es común el bosque de altura o páramo, la principal y más delicada víctima del fuego.

Según las estadísticas del Ministerio del Ambiente y Energía, el incendio de esta semana en Dúrika es el más grande de los últimos 28 años que haya afectado a un bosque de altura.

El último de gran magnitud ocurrió en marzo de 1976 cuando se quemaron 9.000 hectáreas de páramo en el cerro Chirripó.

Según datos de la organización ecologista The Nature Conservancy (Conservación de la Naturaleza), en el país solo hay 15.000 hectáreas de páramo.

Costa Rica se precia de tener la mayor cantidad de bosque de este tipo en Centroamérica. Solo hay 3.000 hectáreas más en Panamá.

El resto está en Ecuador, Venezuela, Colombia y Brasil.

El especialista en ciencia de esta organización, Maarten Kappelle, explicó que los páramos pueden tardar entre cinco y 15 años en regenerarse.

Se sabe que los arbustos y algunas especies menores como el bambú retoñan después del fuego, pero no ocurre lo mismo con las 400 especies de plantas con flores que son propias de la zona, entre ellas las orquídeas.

Tampoco es fácil la recuperación de grandes árboles como roble, ron ron, cedro dulce, amarillón, tirrá, candelillo, ira rosa, ciprés lorito y cerillo.

El mayor de los problemas para estas especies, agregó Maarten Kappelle, es que la incidencia de los fuegos mucha veces es superior a la capacidad de regeneración del bosque.

Es el caso del cerro Chirripó, que afrontó dos incendios en menos de 10 años (en 1976 y 1985).

Source: La Nacion, Vanessa Loaiza N. (vloaiza@nacion.com)

 

(Source: La Nacion)

The National Metereological Institute (Instituto Metereológico Nacional) is alerting on the fire incident in the Talamanca Region.

The National Commission of Risk Prevention and Emergency Attention (Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias) on 24 March 2004 has issued a press release, where preventive alert is declared for the area.
It has also prepared a map, depicting the area of the incident.

The following MODIS scenes show fires burning in Costa Rica on 24 and 26 March 2004. On the image of 24 March 2004 the thick smoke plume coming form the fires in southern Costa Rica can be well appreciated as it drifts out over the Pacific Ocean.

24 March 2004
16:30 UTC
Terra Satellite

26 March 2004
16:15 UTC
Terra Satellite

(Image courtesy MODIS Rapid Response Team)

For additional information see:

As well as the Regional South America Wildland Fire Network


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